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Durante
el embarazo, es común la aparición de algunos problemas dentales tales
como caries dental y gingivitis debido a una serie de cambios hormonales
y también algunos cambios de estilo de vida. Entre estos cambios son el aumento de la acidez de la boca, aumento de
la frecuencia y el consumo de dulces y una mala higiene bucal se
producen la formación de placa.
Por
lo tanto, las mujeres embarazadas deben redoblar el cuidado, evitar el
consumo excesivo de dulces, especialmente entre las comidas, trate de
hacer una limpieza completa de los dientes con el cepillo y el hilo
dental para evitar la aparición de la placa y visitar a su dentista para
que le oriente mejor
en las medidas preventivas, como el uso flúor. El momento más adecuado
para la anestesia en el tratamiento dental, si es necesario, en el
segundo trimestre del embarazo, siempre que el profesional tiene la
plena seguridad en relación con los efectos de los anestésicos y los
cambios existentes gravidez. En el embarazo, aumenta la necesidad de calcio alrededor de 50%, por lo
que la ingesta de alimentos ricos en esta sustancia es de suma
importancia para la formación de los dientes esqueleto y del bebé. Este
mineral también es importante para el correcto funcionamiento del
cuerpo de la mujer embarazada, ayudando en la coagulación y el
mantenimiento de la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la
contracción muscular en orden, teniendo también la acción sobre la
producción de leche materna.